19-Septiembre-2011
CUESTIONARIO 2: EXAMEN DE LA CABEZA A LOS PIES
1.- Cita tres partes del examen de la cabeza a los pies:
El examen de la cabeza a los pies consiste en la exploración física general del paciente. El término general implica que abarca al enfermo en su totalidad. Tres de las partes que constituyen el examen de la cabeza a los pies son: cabeza (incluye la exploración del cabello, frente, cara, ojos, oídos, nariz y boca) cuello y tórax (plano anterior –corazón y mamas- plano posterior –columna dorsal y campos pulmonares).
2.- Desarrolla una de las partes anteriores:
La exploración física de la cabeza implica:
Cabello: cantidad, implantación, color y trofismo.
Frente: temperatura y humedad, puntos dolorosos y formación de arrugas.
Cara: tez, simetría, fuerza mandibular, sensibilidad cutánea.
Ojos: inspección, reflejo fotomotor, acomodación y convergencia, agudeza visual.
Oídos: inspección, palpación de mastoides y agudeza auditiva.
Nariz: forma, coloración, secreción y lesiones en el vestíbulo.
Boca: labios (forma, simetría, color, lesiones), lengua (coloración y humedad, tamaño, simetría y silueta, posición y movilidad, aspecto papilar) encías y mucosa bocal (color, lesiones, aliento), arcadas dentarias y faringe y amígdalas.
3.- Formas de valoración de los pacientes.
Son diversas las formas de valoración de los pacientes. Aunque la más empleada es siguiendo los once patrones funcionales de salud de Marjoy y Gordon (patrón de percepción-manejo de la salud, patrón nutricional-metabólico, de eliminación, de actividad-ejercicio, de sueño-descanso, cognitvo-perceptual, autopercepción-autoconcepto, rol-relaciones, sexualidad-reproducción, adaptación-tolerancia al estrés y valores-creencias) pues permite considerar más allá de la estructura corporal o de la función (fisiología), otra de las formas de valorar al paciente es siguiendo la teoría de las necesidades humanas de Virginia Henderson (repirar con normalidad, comer y beber adecuadamente, eliminar los desechos del organismo, movimiento y mantenimiento de una postura adecuada, descansar y dormir, seleccionar vestimenta adecuada, mantener la temperatura corporal, manterner la higiene corporal, evitar los peligros del entorno, comunicarse con otros, ejercer culto a Dios según la religión, trabajar de forma que permita sentirse realizado, participar en formas de recreación y ocio, estudiar y descubrir la curiosidad que conduce a un desarrollo normal de salud). Para finalizar, en ocasiones la valoración del paciente se puede realizar por sistemas corporales.
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